viernes, 19 de agosto de 2016

Comentario de una ciudadana observadora.

     ¡Hola! Hoy quiero hacer un comentario sobre algunos detalles de los políticos que hoy en día dirigen nuestro país, detalles que se relacionan con el ego que tenía Trujillo. Claro que primero debemos recordar las ganas que tenía Trujillo de que lo viéramos como el santo que vino a salvarnos.
      Si se fijan, en Rep. Dominicana, pareciera que cada edificación construida por una institución del Estado debe llevar el nombre (o cualquier tipo de señal) de quién la mandó hacer. Eso me hace pensar que tal vez los políticos quieran que hagamos un altar en su honor. Lo más lógico es que su objetivo sea que veamos "lo bien que hacen su trabajo" y que votemos por ellos nuevamente. Pero, si ese fuera el caso, ¿no es mejor dejar que los hechos hablen por sí solos? 
      Creo que la ciudadanía ha olvidado cuál es el trabajo de los políticos. Cada cargo tiene sus respectivas funciones, y no hace falta que anuncien cada cosa que harán. Tal vez estamos tan acostumbrados a que no se haga nada (o que se hagan cosas a medias) que necesitamos que nos avisen con grandes vallas cuando se construye un acera. 
        Quiero dejar claro que no estoy hablando de todos los políticos, pues todo tiene su excepción. Sin embargo, a quien le sirva el sombrero que se lo ponga. 


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